Perspectiva Psicológica.- Los padres pueden manifestar diferentes estilos en la forma de comunicarse con sus hijos. Pero de seguro que cuando se utiliza expresiones de cortesía, se consigue mayores resultados.
No es que sea permisivo con sus hijos, sino más bien que aunque sea con autoridad las palabras que utilice sean de cortesía.
La comunicación en familia debe basarse en la confianza y no en la sospecha. Todos debemos saber actuar con empatía, lo que significa ponerse en lugar del otro tanto en el caso de los padres como de los hijos. Y en base a esa confianza familiar y a esa empatía, es lógico que cada uno mantenga y defienda sus criterios.
Teniendo claro que la familia es una jerarquía de amor, para terminar con la receta de la comunicación en la familia debemos escuchar más y hablar menos, comprender a los demás y expresarnos con cariño y afecto.
Siempre se debe hablar con honestidad y sinceridad, así evitamos que las emociones se antepongan a la razón. Para evitar estas situaciones es bueno trabajar en una buena comunicación basada en el diálogo, charlas cotidianas y reuniones familiares, etc. Siempre pensar en positivo de la otra persona da mucho resultado, así poder mantener un equilibrio.
Para conseguir una buena convivencia familiar, los miembros de tu familia se deben conocer. Lo importante es destinar un espacio a la convivencia familiar que sea un compromiso tan importante como asistir a la escuela o al trabajo.
Al momento de comunicarte con tu familia procura que todo lo que digas impacte de forma positiva a los demás.
¡Recuerda que después de Dios tu familia es lo más importante!